¿Cómo Combaten las Embarcaciones la Corrosión en el Mar?
La corrosión puede ser un problema importante para cualquier industria que trabaje con metal, incluida la industria naviera. El clima marino severo, con sus altos niveles de salinidad y humedad, hace que los barcos sean propensos a la corrosión. Si se deja sin atención, puede debilitar la construcción del barco, planteando problemas de seguridad y requiriendo reparaciones costosas.
En el caso del sector marino o naviero, el acero suave es el metal más preferido para construir barcos debido a su bajo costo, resistencia mecánica y facilidad de fabricación. Sin embargo, su principal problema es que se corroa fácilmente al entrar en contacto con el agua salada del mar. En segundo lugar, si no se protege adecuadamente, pierde su resistencia rápidamente, lo que podría llevar a fallos estructurales.
Según NACE International, el costo total de la corrosión en el sector marino en todo el mundo está entre 50 y 80 mil millones de dólares anuales.
Es por ello que en este artículo discutiremos algunos métodos estándar utilizados para proteger los barcos de la corrosión:
Mejora del Diseño del Barco:
Algunas características de diseño pueden ayudar a reducir la tasa de corrosión y disminuir los costos de mantenimiento durante la vida activa del barco, como:
– Colocar adecuadamente sumideros y desagües es esencial para ayudar al drenaje de agua de cubiertas, pozos y áreas de sentina, eliminando una causa directa de actividad corrosiva.
– Para reducir la corrosión galvánica, se debe instalar aislamiento en áreas donde diferentes metales están colocados cerca uno del otro. También se puede instalar un sistema de corriente impresionada que monitorea la actividad de la celda corrosiva y aplica una corriente a ánodos protectores para detectar y gestionar la corrosión.
– En ubicaciones con cambios de temperatura, se necesita aislamiento para detener la fatiga térmica.
Recubrimiento:
Una de las formas más efectivas de proteger los barcos de la corrosión es aplicar recubrimientos a las superficies del barco. Estos recubrimientos de pintura especializada actúan como barreras, protegiendo las superficies de metal del entorno corrosivo. Dado que el casco del barco y la cubierta abierta están en contacto constante con agua y la atmósfera marina, esta capa adicional de protección evita que la humedad y la sal entren en contacto con la superficie de metal y reduce la probabilidad de corrosión.
Los recubrimientos de pintura del casco también evitan que la vida marina, como algas y moluscos, se adhiera al casco, lo que podría exponer el metal al agua de mar y aumentar la tasa de corrosión. También proporcionan una superficie de casco lisa para reducir la resistencia y la fricción sobre el casco, aumentando así la eficiencia del combustible.
Los tipos más comunes de recubrimientos incluyen epoxi, poliuretano y recubrimientos ricos en zinc. Los recubrimientos de epoxi son populares porque son altamente resistentes al agua y a los productos químicos y ofrecen una excelente adherencia a las superficies de metal. Los recubrimientos de poliuretano también se utilizan comúnmente porque proporcionan un acabado resistente y duradero que puede soportar condiciones adversas.
Protección Catódica:
La protección catódica es un método que implica el uso de ánodos sacrificados, los cuales se corroen (o se sacrifican) en lugar del metal del barco, salvando así el metal de la corrosión.
Hay dos tipos de protección catódica: galvánica y corriente impresionada.
- La protección catódica galvánica implica el uso de ánodos sacrificados que están conectados al metal que se está protegiendo. Cuando los ánodos se corroen, liberan electrones, que fluyen hacia el metal y previenen la corrosión.
- La protección catódica por corriente impresionada, por otro lado, implica el uso de una fuente de energía externa para proporcionar los electrones necesarios para proteger la superficie de metal.
Ambos tipos de protección catódica son efectivos para proteger los barcos de la corrosión. Generalmente, se prefiere la protección catódica por corriente impresionada para cubrir áreas más extensas y se puede ajustar precisamente para satisfacer las necesidades específicas del barco.
Inhibidores de Corrosión:
Estos son compuestos químicos aplicados en la superficie del metal. No son un método preventivo, pero los inhibidores de corrosión reducen la velocidad de corrosión en materiales como metal o aleación. Es una forma rentable de prevenir o controlar la corrosión, ya que el uso de inhibidores de corrosión puede ahorrar hasta un 35% de pérdidas debido a la contaminación en los barcos.
La ventaja principal de los inhibidores de corrosión es el uso de metales más baratos que el acero y la aleación en un entorno hostil. Una vez aplicados con productos químicos inhibidores de corrosión, pueden funcionar durante más tiempo que su edad prescrita. También reducen los costos de mantenimiento al proporcionar protección contra el óxido.